sábado, 9 de febrero de 2013


¿Por qué LA GENTE SUSPENDE?

Hoy en día, en España, podemos decir que la educación es un fracaso debido a la gran cantidad de suspensos que se pueden encontrar tanto en la ESO como en bachillerato y, también, al gran número de jóvenes que no estudian (la conocida generación ni ni, ni estudia ni trabaja).

¿A qué se debe que la gente suspenda? Esta es una respuesta muy complicada de responder porque hay muchos factores que intervienen a la hora de suspender desde un problema psicológico o mental hasta un problema de vagancia.

Primero que todo, un factor fundamental que puede explicar esta pregunta es lo que dice Gardner en su teoría de las teorías múltiples. Según Gardner, uno puede ser más inteligente en una tarea y ser muy malo en otra. Por ejemplo, uno puede tener mucho mas desarrollada la inteligencia lógico-matemáticas que la inteligencia lingüística, es decir, ser bueno en matemáticas y en lengua no o viceversa.

Otro factor que hay que destacar, que es importante y que se ve mucho en la sociedad actual, en especial entre los jóvenes, es la figura del denominado malote. Para analizar este factor hay que recurrir a la psicología, exactamente al aprendizaje observacional de Albert Bandura. Según su teoría de la imitación por modelos, uno imita la forma de ser de la persona que tiene éxito social, por lo tanto, muchos jóvenes que ven a estas personas (los malotes) que suspenden, que nadie se mete con él y que mantienen rodeados de mujeres, teniendo de esta forma un gran éxito, van a intentar hacer lo mismo que el malote hace teniendo así el éxito social que buscan pero también conseguirán un gran fracaso escolar.

Por otro lado y en menor medida, debemos concentrarnos en el conductismo, concretamente en el condicionamiento operante o instrumental de Skinner. Dentro de este tipo de conductismo se explica la ley del efecto: respuestas seguidas por consecuencias satisfactorias tienden a repetirse. Hoy en día, muchos padres premian a sus hijos con regalos por haber estudiado y por haber aprobado todas sus materias, pero en el momento en que los padres dejen de premiarlos, estos dejaran de esforzarse en el estudio ya que al final no obtendrán ninguna gratificación. Para evitar este problema lo mejor que pueden hacer nuestros padres es no premiar a sus hijos por algo que deben hacer.

Otro factor, a la hora de suspender, es la motivación, que es una incitación interior que te lleva a realizar y a terminar un comportamiento. Actualmente, muchos jóvenes han perdido esta motivación por el estudio y es un gran problema porque los padres no pueden hacer nada para solucionarlo ya que es algo que te tiene que salir de ti mismo. Sin embargo, los padres tienen que ver mucho con esta pérdida de la motivación porque ellos tenían que inculcar a sus hijos el deseo de ser alguien profesional y de marcarse metas en sus vidas para un futuro desde que eran pequeños.

Por último, los profesores también tienen algo de culpa por la que los jóvenes suspenden porque puede que estos no se expliquen bien en clase. También, puede ser que los alumnos tengan problemas a la hora de entender y en este caso hay que buscar ayuda profesional.